Chema Madoz, Premio Nacional de Fotografía y uno de los grandes de la imaginería fotográfica española, inaugura hoy una exposición de obra reciente en la Galería Elvira González de Madrid. En esta muestra, abierta al público hasta junio, se pueden ver 30 obras realizadas entre 2019 y 2020 y, por primera vez, Madoz incluye entre ellas una escultura. Sin duda, esto último responde a una reiterada petición que, a lo largo de los años, le han transmitido muchos de sus numerosos seguidores y coleccionistas al considerar que los objetos creados por el fotógrafo para ser fotografiados, merecen en sí mismos la consideración de obra de arte.
De las obras de pequeñísimo formato que en los años 80 exponía en el Círculo de Bellas Artes de Madrid, a las fotografías de grandes dimensiones que ya desde hace décadas produce, Chema Madoz ha transitado un largo camino en el que siempre se ha mantenido fiel a su elaborado y personal concepto del objeto, entroncado con un enfoque surrealista que no ha abandonado nunca, ni siquiera cuando ha realizado fotografía publicitaria por encargo de firmas como Purificación García o Hermés.
Sin embargo, con una larga y fértil producción a sus espalas, se puede decir con fundamento que el artista madrileño va un paso más allá de la simple descontextualización del objet trouvé de Duchmp y también de la mera paradoja significativa magritiana (ces´t ne pa une pipe). Madoz tiene su propia vía fundamentada en la contraposición de elementos con significados y funcionalidades que dan lugar a visiones paradójicas. Debido a su coherencia consistencia creativa, casi cualquiera de sus obras ejemplifica la esencia de su vía creativa, pero por fijarnos en las presentes en esta última muestra, una de ellas es un verdadero epítome de esa forma de proceder: un castillo de naipes sostenido por una estructura de andamios.
Chema Madoz (Madrid,1958) se ha hecho acreedor a importantes premios a lo largo de su carrera, entre ellos el Premio Kodak en 1990 o el Premio Nacional de Fotografía que concede el Ministerio de Cultura de España. Su obra está representada en numerosas colecciones públicas y privadas, como la del Museo Reina Sofía, el Centro Andaluz de la Fotografía, la Fundación Juan March, la Fundación Telefónica, la Fundación Coca-Cola, la Fundación Bellas Artes de Buenos Aires, el IVAM de Valencia, el Museo de Bellas Artes de Houston, la Colección Margulies de Miami, el Museo de Bellas Artes de Houston o el Museo de Arte Marugame Hirai de Kagawa-ken.
