Los secretos de la fotografía de viajes es el título de la última obra de Tino Soriano, un profesional que, tras 30 años de ejercicio, ha dejado tras de sí numerosísimos reportajes en prestigiosas publicaciones y también unos cuantos libros.
De todas las obras suyas que yo he revisado, creo que Los secretos de la fotografía de viajes es el mejor, quizás porque sea el más maduro, quizás porque la cuidada edición realizada por Anaya Multimedia ha conseguido poner en nuestras manos una obra que atrae por su forma, sus textos y, por supuesto, por las magníficas imágenes que la ilustran.
No estamos ante un libro técnico sino ante la obra de un fotógrafo que ha dado varias veces la vuelta al mundo trabajando y que, con la perspectiva de los años, pone negro sobre blanco un montón de consejos extraídos de su experiencia personal a la hora de fotografiar paisajes, acercarse las personas, captar imágenes de las fiestas, enfrentarse al mal tiempo, etc.
Además de los innumerables trucos y consejos aquilatados en el texto, hay que decir que la ingente cantidad de fotografías que los acompañan sirven para algo más que ilustrar los conceptos. Nos encontramos prácticamente ante un libro de autor y cada una de las fotografías reproducidas en él se ha ganado merecidamente su presencia.
Yo diría que Tino Soriano ha pasado muchísimas horas seleccionando las imágenes que iba a incluir en esta obra y todas ellas tienen algo en común: demuestran que el autor tiene una visión propia con la que es capaz de crear fotografías originales y representativas de su estilo aun cuando éste captando la imagen de lugares por los que han pasado antes y seguirán pasando después miles de turistas y fotógrafos aficionados.
Esto hace que el visionado del libro resulte aleccionador y muy inspirador y que merezca la pena repasarlo varias veces y volverá el de cuando en cuando él para captar visualmente las enseñanzas que trasmiten las imágenes realizadas por Tino Soriano.
El libro está dividido en cinco capítulos. Tres de ellos son temáticos, dedicados a la fotografía de paisajes, la fotografía de retratos en viajes y la fotografía de fiestas, safaris, museos, monumentos, cruceros y trenes.
Completan la obra un cuarto capítulo dedicado al color y la composición y la cierra otro más que el propio autor califica como cajón de sastre y quizá por serlo, tiene una alta densidad de buenos consejos y trucos relacionados con el ejercicio profesional de la fotografía de viajes. Para que nadie se asuste con la extensión de los textos, conviene decir que cada uno de estos cinco grandes capítulos tiene múltiples subcapítulos y ninguno de ellos es muy extenso.
El libro contiene 272 páginas en formato apaisado (25 x 20 cm), una gran elección porque, aunque nunca encaja bien en las estanterías, se presta inmejorablemente a la reproducción de la mayoría de las fotografías que el autor ha seleccionado. Por añadidura, ayuda mucho a la buena presentación de la obra el hecho de que no estemos ante una traducción sino una obra encargada directamente por Anaya Multimedia, de esta manera la correspondencia entre los textos y las fotografías no se descompagina como ocurre muchas veces cuando los libros son traducciones de otras lenguas.
Creo que estamos ante un gran libro por el que hay que felicitar sinceramente al autor y a la editorial.
El libro puede ser adquirido a través de este enlace: Los secretos de la fotografía de viajes
