Hasta el próximo día 3 de marzo ARCO 19, la 38ª edición de la feria, ofrece a los visitantes que acudan al recinto ferial de Madrid la posibilidad de encontrarse con una representación amplia y variada del arte contemporáneo, fotografía incluida, por supuesto.
De ARCO se puede decir que siempre es igual o que siempre es distinta porque lo característico de la mayor feria española de arte contemporáneo es que siempre presenta novedades, nunca se repite y en eso siempre es igual.
En esta nueva edición, ARCO llena sus pabellones del recinto ferial de Madrid con 203 galería de 31 países, una parte importante de ellas procedentes de Perú, país invitado en esta edición.
Arco 19 en clave fotográfica
He dado un paseo rápido por la feria con el foco puesto en la fotografía que, como ocurre ya desde hace ya largos años convive, en plano de igualdad con el resto de las técnicas a disposición del artista. Por esta razón, la obra fotográfica está aquí y allá en un pabellón, en el otro y en las paredes de muchas de las galerías que la acogen junto a esculturas, pinturas o instalaciones (pocas) sin mayor distinción.

Premios nacionales de fotografía
En las paredes de ARCO se puede apreciar la obra de varios premios nacionales de fotografía. Allí estaba un precioso políptico del madrileño Javier Valhonrat, compuesto por cuatro imágenes irregularmente ensambladas en un solo marco, una obra intimista que resalta la poderosa mirada de este veterano autor capaz de encontrar la belleza en cualquier acera.

También Cristina García Rodero nutría esta presencia de premios nacionales con varias imágenes intencionadamente alejadas de su tradicional blanco y negro para captar adecuadamente el desbordamiento de color de la fiesta India del Holi. De Rosa y Bleda he podido ver un par de magníficos paisajes puestos en valor por el empaque del gran formato y de
Alberto García Alix algunas fotografías de grafitis.

En el caso de Isabel Muñoz, su obra cuenta con una representación privilegiada en todos los sentidos ya que el stand de El Mundo está totalmente dedicado a su obra con una amplia exposición bajo el título Cosmos basada en imágenes de bailarines de butoh.

Pocos fotógrafos clásicos
De autores clásicos he podido encontrar en mi recorrido apresurado prácticamente nada. Apenas un conjunto de fotografías de Robert Mapplethorpe que no pertenecen a sus series más conocidas, varias obras de Nan Goldim. Seguro que habría más pero en mi apresurada visita no me salió al paso.
Un hallazgo español inesperado
Un hallazgo inesperado para mí y de gran interés ha sido el descubrir la obra de Marcel Giró y su mujer Palmira Puig, dos catalanes que tras la guerra española marcharon a Colombia y Brasil para acabar abriendo en Sao Paulo uno de los estudios fotográficos comerciales más importantes de su época, allá por los años 50.

De vuelta a España y abandonada la fotografía por las circunstancias de la vida y las enfermedades el archivo comercial y su importante obra personal experimental acabó llegando a un sobrino de la pareja (que murió sin descendencia directa) y hoy lo administra la galería Rocío Santa Cruz en cuyo stand es posible ver múltiples copias vintage de este clásico aún poco conocido en España.
Variedad de técnica y soportes
También la fotografía como base para las técnicas mixtas, es decir aquella en la que el artista interviene sobre el papel fotográfico con pintura y otros materiales se encuentra representada en diferentes galerías.
Son muy impresionantes y atractivas las grandes (213×150 cm) obras de Javier Pérez de camas revueltas en blanco y negro que se convierten en matéricas mediante la arena que el artista deposita sobre ellas. Tiene también interés Damir Ocko y sus collages.

Javier Pérez
La innovación en el uso de soportes especiales está igualmente representada en esta edición de ARCO. Entre otras, recibe especial atención del público y también de los medios de comunicación un díptico de Michelangelo Pistoletto. Este autor italiano ha pegado dos grandes fotografías hechas sobre seda y la ha pegado sobre sendos espejos murales (250×150 cm) colocados en ángulo de 90 grados. Esta disposición permite múltiples combinaciones y efectos ópticos, incluso que el espectador “interactúe” con los personajes mezclándose con ellos visualmente.

Michelangelo Pistoletto
La fotografía creativa
Arco da cabida a muchos géneros fotográficos pero sin duda el que se enuncia como “fotografía creativa” encuentra en este espacio su entorno privilegiado y son muchas pas propuestas que se podrían encuadrar bajo este epígrafe.

El tamaño a veces importa
Aunque me repito, no quiero dejar de hacer una mención al formato de las fotografías que sigue en fase de cuarto creciente ya que cada vez son mayores las copias. lo cual en muchas obras aporta una cualidad que no estaría presente en ellas con otra escala. La verdad es que escala y obra de arte han tenido siempre una relación mucho más esencial qué circunstancial y muy a menudo en la fotografía eso se refuerza y se válida.
