Nos llega noticia de una empresa nueva, Shootvenirs, con una idea no tan nueva pero que tiene sentido: ponerte en contacto con un fotógrafo del lugar al que vas a viajar para que allí te haga una colección de fotos solo, con tu pareja, tu familia o amigos. Hace un par de años escribimos en FotografoDigital.com de una iniciativa igual, que tenía por nombre Flytographer y aún existe, así que la idea no debe de estar tan mal ya que a algunos les da de vivir.
A día de hoy, la plataforma de Shootvenirs ha reunido en su red más de 240 fotógrafos en 100 ciudades alrededor del mundo. No importa si estás en Madrid, Amsterdam, Moscú, Los ángeles, Bogotá o Bali, la red de esta empresa cuenta con fotógrafos en ciudades de Europa, América, Asia y Oceanía.
Independientemente del destino, los precios de sus servicios son fijos y varían en función de una combinación fija del tiempo que te dedica el fotógrafo, el número de fotos que te entrega y las localizaciones en las que te ubica. La opción más sencilla son 25 fotos realizadas en media hora en una sola localización y tiene un coste de 200 dólares. En el otro extremo, 3 horas de trabajo y 150 fotografía en varias localizaciones asciende a 470 dolares.
Hay que decir que el cliente no va a ciegas. Cuando decide cuál es el destino por el que está interesado, puede pinchar en él y ver los fotógrafos disponibles en él así como ejemplos del tipo de fotografías que realizan.
La iniciativa de Shootvenirs viene de la mano de un grupo de emprendedores mexicanos que crearon una plataforma que conecta a los viajeros con fotógrafos locales alrededor del mundo, una idea de negocio online colaborativo.
Una de las virtudes de esta idea es que ese fotógrafo local que contratamos no solo captará imágenes profesionales (previsiblemente) sino que además será un guía perfecto para conocer los mejores rincones de la ciudad, al menos los que ellos consideran más fotogénicos.
La lógica me lleva a pensar que esta nos es una opción para todos los viajes de vacaciones que realizamos pero quizás sí para algunos que tienen una especial significación. Sin duda, hay diferencia entre un selfie, con palo o sin él, y un reportaje profesional que puede captar momentos más distendidos y no necesariamente posados.