Puntual a su cita de febrero, Madrid se ha convertido en eel gran escaparate del arte gracias a la celebración de ARCO 2015 que llega este año a su 34 edición, y llega con el optimismo de un mercado, el del arte, que parece que empieza a respirar después de años de asfixia. La feria por excelencia comparte también cartel con ArtMadrid que, como quien no quiere la cosa ha conseguido ya doblar la esquina de su décimo aniversario y puede con ello decir que es también una feria veterana y, en su caso reducida pero marcada por la calidad.
En ARCO participan 222 galerías de 29 países, es decir todo un mundo que se extiende por dos pabellones de Ifema (7 y 9) y muestra pintura, instalaciones, escultura, fotografía, vídeo, new media, dibujo y grabado… en una palabra, todo.
El visitante a ARCO va a poder además estar en contacto con obra y artistas que normalmente nos son ajenos gracias a la internacionalización de la feria donde las galerías extranjeras representan el 71% del total y, este año, una parte importante de ellas proceden de Sudamérica.
El precio de acceso a ARCO el viernes y sábado es de 40 euros y el domingo cuesta 20. Como es costumbre, la feria se celebra en Ifema. Toda la información sobre la feria se encuentra en su página web: ARCO madrid
Todo lo que respecta a ArtMadrid tiene otra dimensión. Ubicada por segundo año en el patio de cristales del Ayuntamiento de Madrid, junto a Cibeles, la feria ha sido capaz de reunir a 44 galerías nacionales e internacionales que representan a más de 200 artistas. Es una feria interesante con una propuesta artística amplia, variada y representativa de todas las tendencias aunque por técnicas fundamentalmente concentrada en la pintura, escultura y fotografía. El precio de acceso es de 10 euros y toda su información se encuentra en su web: ArtMadrid 10
De la fotografía tanto en Arco como en ArtMadrid se puede decir que goza de buena salud y que convive en plano de igualdad con la obra artística que se expresa mediante otras técnica. Los días del gheto hace mucho tiempo que quedaron atrás. Quizás si resulte curioso constatar cómo la paulatina incorporación de la fotografía al mercado general del arte ha tenido como consecuencia una cierta elefantiasis de modo que hoy en las ferias de primera línea prácticamente sólo los muertos exponen fotografías «pequeñas» que no lo son en realidad, pero lo parecen en comparación con los formatos hoy al uso cuyos lados superan con creces el metro.
En fotografía se puede encontrar en las ferias de arte de Madrid todo: nueva realidad, documentalismo, experimentalismo, fotografía callejera… y nombres clásicos y nuevos unos firmemente asentados y otros consolidándose y fogueandose en el circuito galerístico y ferial. La lista sería muy larga e imposible pero en ella figuran nombres como Pablo Genovés, Robert Maplethorpe, Jessica Lange, Cecilia de Val, Cecilia Paredes, Humberto Rivas, José Manuel Ballester, Thomas Ruff, Germán Gómez, Esther Ferrer, Marina Abramovic, Alberto García Alix, Ouka Leele, Erwin Olaf, Herb Ritts, Isabel Muñoz, Leticia Felgueroso, Xurxo Gómez Chao, Chema Madoz… así, sin orden ni concierto, por citar sólo algunos de los nombres de fotógrafos que he encontrado en mi apresurado paseo por las dos ferias que ayer abrieron sus puertas.
En cualquier caso tanto para los amantes de la fotografía como del arte en general creo que la una, la otra o ambas, son una visita llena de satisfacción.