Canon ha añadido dos nuevos modelos a su larga lista de cámaras réflex digitales (DSLR) de su serie EOS: la EOS 77D y la EOS 800D. El corazón de ambos aparatos es el mismo, ya que comparten sensor y procesador de imagen. Concretamente un sensor CMOS APS-C de 24,2 megapíxeles y un moderno procesador DIGIC 7.
Las diferencias vienen marcadas por la familia a la que pertenecen ya que en la gama Canon cuanto más alto es el número de la cámara, más sencilla es esta. De ese modo, la 800D es una tataranieta de la 300D con la que muchos nos iniciamos en la fotografía digital réflex y está en el segmento de cámaras de “entrada” en el mundo réflex, si bien hay una línea aún más sencilla que se denomina en millares en lugar de en centenas. La 800D supera al modelo que la precede, 760D, en prestaciones como el número de puntos de enfoque (45 AF de cruz), la velocidad de ráfaga (6 fotogramas por segundo hasta 27 imágenes RAW) o la sensibilidad ISO (hasta 25.600 ampliable un paso).
La EOS 77D se posiciona un escalón por arriba, en una gama superior y puede satisfacer perfectamente las necesidades de un aficionado avanzado. Al contrario de lo que ocurre con la cámara precedente, la 77D, ofrece prestaciones inferiores a los de un modelo preexistente, la 80D. Con todo, sus especificaciones son muy atractivas: 45 puntos AF en cruz, ISO 25.600 ampliable un punto, ráfagas a un velocidad de 6 fotogramas por segundo hasta 25 imágenes RAW.
Como se ve, las prestaciones de una y otra cámara son muy similares sobre el papel, pero la calidad de fabricación y dureza, marca las diferencias de uno a otro modelo.
Por lo que respecta al vídeo, ambos modelo pueden grabar imagen en movimiento en calidad Full HD 60p y tienen un modo de Vídeo HDR para compensar las diferencias de luminosidad en la escena. Otro punto importante para el rodaje es que esta cámaras disponen de un sistema de Dual Pixel CMOS AF capaz de seguir a los sujetos mientras se mueven y enfocarlos con suavidad. Igualmente importante es el hecho de que las cámaras vienen dotadas de un estabilizador de imagen digital en 5 ejes para compensar el movimiento mientras se graba cámara en mano.